domingo, 26 de septiembre de 2010

LA QUESTIONE MERIDIONALE


“NOI SIAMO LA MAGNA GRECIA” es uno de los cánticos que los seguidores (tifosi) del Crotone F. C. (Football Club) entonan cuando visita su estadio algún equipo (squadra) del norte de Italia / por si la cosa no quedara suficientemente clara un grupo de supporters / autodenominado Gioventù Pitagorica / ha adoptado como símbolo la imagen de un guerrero aqueo / son estos aficionados los que suelen corear al portero rival (aquí el informante / un erasmus peruano / utiliza la palabra arquero) “oi portie a fissa i mammta / eoooo / oi portie a fissa i mammta / eoooo / oi portie a fissa i mammta / eoooo” / mentándole la madre en dialecto calabrés (conchatumadre o chingatumadre en la versión peruana) / en contra de lo que pudiera parecer / estos animadores / cumplidores pitagóricos / preconizan la no violencia tal como se practicaba ya en la comunidad pitagórica de Crotona / una comuna científico-religiosa y vegetariana fundada en 518 a.C. que no excluía a las mujeres / como tampoco se las elude en la cancha del Crotone F. C. (temple del calcio) / donde las Figlie di Hera constituyen un grupo ancor più particolare / pues está compuesto exclusivamente por donne e ragazze que ya se han ganado el rispetto di tutta la curva dei sostenitori rossoblù / así sorprende que el corresponsal / cuya asistencia al menos a dos partidos en el Estadio Comunale Ezio Scida / está perfectamente documentada / no haga ningún comentario sobre estas animadoras femeninas / pero el mismo descuido mostró Aristóteles a la hora de citar a Pitágoras en el texto en que glosó / con poco disimulado escepticismo / una de sus más sugerentes ideas / LA MÚSICA DE LAS ESFERAS / algunos creen (esa es la fórmula que utiliza) que los cuerpos celestes emiten a través del éter series de sonidos armónicos cuya combinación produce una melodía permanente a la que llaman música de las esferas / afirman que tales sonidos resultan de la vibración producida por los movimientos rotatorios de los astros en el espacio cósmico / cada uno de ellos en un tono diferente de la escala musical en función del tamaño de los radios de sus órbitas / de la misma forma que las notas emitidas por las cuerdas de una lira dependen de su longitud / los hombres no pueden escuchar la melodía cósmica porque han crecido acostumbrados a ella / y porque los cuerpos celestes que giran sin tregua en sus órbitas producen sin cesar estas armonías / de modo que al no haber intervalos de silencio no se puede apreciar la música ya que ambos se perciben únicamente por su mutuo contraste / así y todo consideran los pitagóricos que la música de los hombres no es más que un eco / una sombra / de la música de las esferas que resuena en nuestro espíritu pese a que no podamos percibirla con los sentidos /

sábado, 11 de septiembre de 2010

CAPILLA ARDIENTE



"Souvenir" - Óleo/Lienzo - 195 x 162 cm - 2001 

el sentido es ave traviesa de paso leve y asustadizo / nunca se confía y elude todas las trampas / no hay celada que la retenga por mucho tiempo / voluble en extremo / con demasiada facilidad  se empeña en que lo turbio parezca claro / y ya no es posible saber si se están leyendo correctamente los signos / / recuerdo a una novia que en el momento del orgasmo me gritaba y/o me susurraba / ¡Mohamed! ¡Mohamed! / nunca le pregunté nada / aguardando que ella me revelara algún día su secreto / un pasado oscuro o una elaborada ensoñación erótica / algo que había enterrado tan hondo que sólo afloraba en momentos de máxima tensión y abandono / pasaban los días y el operístico pronunciamiento con que anunciaba sus éxtasis proporcionaba un excitante marco oriental a nuestros encuentros / que se teñían en mi imaginación con los colores y las fragancias de un harén de las mil y una noches / ya estaba planeando sorprenderla una tarde con la habitación constelada de velas encendidas / cojines adamascados / tapices en las paredes / barritas de sándalo y otros cachivaches de atrezo / cuando por alguna razón la relación se terminó y dejamos de vernos / años más tarde / por ciertas experiencias colaterales / llegué a colegir que lo que en realidad decía era ¡mójame! ¡mójame! / aunque ya nunca podré confirmarlo porque le he perdido totalmente la pista / y tampoco sé como podría preguntarle si me la encuentro el día menos pensado en cualquier sitio / una situación embarazosa no cabe duda / a lo mejor ya tiene hijos mayores y todo lo demás / / todavía no hace mucho tiempo que soñé con ella por última vez / sólo recuerdo que se tenía que marchar y yo no podía hacer nada por retenerla porque estaba viviendo como una estatua en la acera de un cruce de calles / al lado de un cajero automático y siempre tenía saldo / así que cuando ya se había dado la vuelta para irse sólo alcancé a decir a modo de despedida / `es como estar hecho de niebla y sentir que se acerca un vendaval´ / / ahora debo añadir / aunque no sé qué pueda tener que ver eso con el difunto de Mohamed / que la siguiente anotación recogida en el cuaderno donde registré el sueño / (y desde entonces una cosa no puede ir sin la otra) / era una noticia de prensa según la cual en un partido de la selección de fútbol de Irak los futbolistas suníes no le pasaban el balón a los compañeros chiíes / pero esto sólo sucedía al principio del encuentro / porque al final sí /

(De El ave fénix solo caga canela)